Prensa MPPEU (15.02.12).- Como parte de las conferencias que se desarrollan en el marco del Congreso Internacional Universidad 2012, en La Habana, Cuba, se inició este tercer día de la jornada con la ponencia del profesor Frei Betto, educador de Brasil, quien compartió junto a las y los presentes algunas reflexiones sobre la concepción de la extensión universitaria y su necesaria relación con la educación popular.
La intervención se centró en la necesidad de redefinir el criterio asumido por las Universidades de la extensión académica, la cual -a su juicio- ha quedado reducida a una suerte de “turismo popular”, víctima de los métodos y orientaciones de la Universidad moderna “que hace de sus estudiantes seres carentes de paciencia intelectual y de sensibilidad humana y que, a su vez, desprecia los aportes de la educación popular como mecanismo para reconocer la sabiduría acumulada por los pueblos. La extensión, de vínculo con la realidad, quedó limitada a un requisito institucional donde se va a comprobar una tesis preestablecida desde las casas de estudio, de respuestas anticipadas, lo que impide que la realidad permee el conocimiento”, afirmó.
En tal sentido, propuso que esta área tan importante del conocimiento profesional, debe estar regida por dos máximas; la primera, que para entender el conocimiento acumulado de los pueblos es necesario compartir la vivencia de sus luchas, las cuales tienen dos dimensiones: la necesidad y la resistencia cultural, religiosa; la segunda, que la Universidad debe insertar la realidad popular en sus dinámicas, para involucrarse en los procesos histórico-sociales. Para ello es fundamental atraer al movimiento popular a la Universidad, para así mejorar la cualidad del aprendizaje.
En este punto, Betto hizo un alto para insertar en la discusión la necesidad del conocimiento histórico como elemento fundamental para construir el futuro de la humanidad. Sobre esto, afirmó que “la deshistoricidad produce la desarticulación completa de nuestra noción como pueblo. Esta visión epistemológica ha hecho de la educación un elemento formador de consumidoras y consumidores, alejándose de su rol de construcción de ciudadanía”. De este modo, el académico brasileño invitó a la Universidad a elevar sus niveles de conciencia y compromiso histórico, a levantar las banderas de lucha y rescatar los sueños de los pueblos.
La necesidad de enlazar la educación universitaria con la visión de proyecto de sociedad se plantea como el único camino para garantizar la supervivencia de la especie humana que, en palabras de Fidel Castro citadas por Betto, está en “grave peligro de extinción” de no tomar las medidas necesarias para revertir los efectos del capitalismo, “modelo fracasado en más de las dos terceras partes del planeta que vive aún en condiciones de pobreza extrema”.
Betto culminó su exposición afirmando que el gran reto de la Universidad y la extensión universitaria pasa por convertir el estudio especializado en un gran laboratorio de proyectos sociales, que haga de los temas sensibles a las realidades locales su principal campo de investigación y acción permanente. “Universidad en el proyecto de mundo, pluriversidad en los modos de desarrollo del proyecto”, concluyó. (Fin /Texto: Osly Hernández /Foto: María París – enviadas especiales a Cuba)
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